Reply 1988 es una carta de amor a todas las personas que te acompañaron al crecer, aquellas que siempre estarán presentes en la memoria por formar parte de quién eres.

Un gran elenco y un precioso OST te llevan en un viaje nostálgico al barrio de Ssangmundong en 1988.

La historia tiene un poco de todo: tristeza, comedia y romance. Aquí cada uno de los personajes es importante, hasta el más pequeño tiene su manera de sobresalir, y llegamos a verlos en distintas facetas, por lo que es imposible no tomarles cariño.

Lo mismo pasa con las parejas, cada una tiene momentos que te hacen saltar el corazón, y tienen peso en el desarrollo individual de los personajes.

Las dinámicas en las amistades y con la familia son la base de este drama, ese es parte del por qué es tan fácil sentirte identificado.

Hay tantas reflexiones a lo largo de la historia y es precioso que muchas de ellas se centren en los padres. Estas personas que hacen sacrificios por sus hijos, que se tragan sus sentimientos para parecer fuertes, pero no dejan de ser humanas, con sueños e ilusiones abandonadas.

El grupo de amigos central es grandioso. Pueden hacer mil bobadas y molestarse mutuamente, sin embargo, el amor que se tienen es indudable (y enorme).

No puedo hacer los comentarios suficientes para explicar lo hermoso que me parece el drama. Basta con decir que logró enamorarme de inicio a fin, sin aburrirme ni un momento en sus 20 episodios con duración de más de una hora y media.

Reply 1988 es un recordatorio de que, no importa que vivamos en países y contextos diferentes, hay cosas con las que siempre nos podremos sentir conectados.