La historia gira en torno a un grupo de amigos que, luego de que uno de ellos heredara unas tierras en el medio de la nada, deciden mudarse al campo para cultivar lechugas/repollos (dependiendo del subtítulo) para así ganar dinero para sacar un álbum (cuando eran adolescentes tenían una banda de rock). Nada, eso. Son chicos de ciudad tratando de cultivar algo en el campo. Obviamente les sale todo mal, lo que nos garantiza a nosotros muchísimas risas.

El guionista de este kdrama es el mismo de Go Go Waikiki y eso se nota. Es una serie cargada de humor absurdo en todos los capítulos, literal que llega un punto en el que te podés esperar cualquier cosa y eso me encantó. Puede que al principio de la sensación de ser una boludez que no va a llegar a ningún lado, pero les puedo prometer que la historia avanza de una forma muy buena y que los personajes están construidos de una manera excelente (es IMPOSIBLE no terminar queriendo hasta a los habitantes del pueblo. Ya los extraño, de verdad).

¿Saben qué es lo mejor? Si quieren romance, lo van a tener, pero en su justa medida. Sí, los cuatro amigos tienen intereses románticos (incluso dos de ellos comparten uno #TriánguloAmoroso), pero la trama no va enteramente por ese lado: Uno de los chicos le debe plata a la mafia, hay personas buscando dinero enterrado en el campo que heredaron, la gente del pueblo los odia, uno de ellos fue diagnosticado con cáncer, etc.
Y por si todo lo que les conté fuera poco, el final es BUENÍSIMO. No lo hubiera esperado ni aunque me hubieran dicho que iba a ser súper impredecible. Tal vez en sí no sorprenda porque, como les dije, uno se puede esperar hasta que aparezca un dinosaurio, pero lo que terminó pasando nunca se me cruzó por la cabeza, AMÉ.

Creo que mi única “queja” es que algunos chistes dan un poco de cringe y otros me parecieron directamente innecesarios (sobre todo al principio).

PD: El second lead puede hacer con mi corazón lo que él quiera, qué hombre bello, por favor♥

IG de reseñas cortas: @altoplottwist